La localidad termal francesa de Capvern-Les-Bains acogió el miércoles 21 de noviembre la celebración de la jornada RENCONTRES CAPAS-Cité: l’activité physique dans la prise en charge de l’adolescent obèse: de la théorie a la pratique, a la que asistieron numerosos profesionales de la actividad física y la salud, tanto franceses como españoles. Con el cupo de inscripción completo desde hacía días, este interesantísimo encuentro se desarrolló en dos escenarios diferentes: la sesión matinal tuvo lugar en el cine de Capvern, repleto para la ocasión, mientras que la tarde transcurrió en la Maison d’Enfants Diététique et Thermale (MEDT).

La jornada se inició con la intervención de Eric Regnaut, de la Agencia Regional de Salud de Occitania, quien expuso a grandes rasgos el plan regional de salud, en el que se llevan a cabo acciones e informaciones para niños y padres que contribuyan a poner en valor la actividad física. También se actúa entre escolares y jóvenes de 16 a 25 años realizando actividades relacionadas con la cocina sana y se trabaja en el terreno del entorno escolar y familiar de los niños. En segundo lugar, Pascale Duché, de la Universidad de Toulon, aportó datos específicos sobre la obesidad en Francia, que indican que en general se han estabilizado las cifras de obesidad; no obstante, señaló que el 75% de la población infantil no cumple con las recomendaciones sobre actividad física, y que los malos hábitos de alimentación se han multiplicado por diez desde 1950.

A continuación intervinieron Maithé Tauber y Augustin Raupp, representantes de la red RéPPOP Midi-Pyrénées, cuyo objetivo es prevenir la obesidad infantil. Apuntaron que lo primero de todo en esa lucha contra la obesidad es ser conscientes de que los cambios son lentos. Así mismo, concluyen que los adolescentes están menos dispuestos a cambiar en su actividad física que en su alimentación, mientras que en el caso de los padres ocurre lo contrario. Tras ellos, Iván Castro, del programa NEREU, explicó las acciones que llevan a cabo en ese mismo terreno de la prevención, pero desde la parte española; el objetivo de NEREU es mejorar la calidad de vida de las familias, promoviendo el ejercicio físico para combatir el sedentarismo y la educación en hábitos saludables.

A la vuelta de una pausa para el café, acompañado de unas brochetas de frutas preparadas por los jóvenes pacientes de la MEDT, la jornada se centró en el tema de la Educación Terapéutica del Paciente (ETP), con exposiciones a cargo de Valérie Laikuen (Clinique du Château de Vernhes), Paloma Bacarizo, Patrick Castéran y Audrey Cauquil en representación de la MEDT y Hervé Farfal por parte de CAPAS-Cité. Todos ellos remarcaron la importancia capital de la ETP para conseguir resultados positivos y visibles en la lucha contra la obesidad, tanto en adultos como en niños y adolescentes. Laikuen incidió en las dificultades de trabajar con una población adulta: aparecen afecciones del sistema digestivo, hay personas que requieren readaptación por desequilibrios vinculados con la obesidad. La ETP ha de basarse en un concepto triangular: médico-paciente-tratamiento, y crear vínculos entre ellos.

Por parte de la Maison d’Enfants Diététique et Thermale (MEDT), Bacarizo, Cauquil y Castéran hicieron hincapié en aspectos esenciales para el tratamiento de la obesidad en los adolescentes: el paciente ha de reflexionar sobre sí mismo en un periodo de la vida tan difícil como la adolescencia, hay que implicar a la familia para que acompañen a sus hijos, proponer actividades que les gusten y faciliten su motivación, acompañarles en la adaptación al esfuerzo, enseñarles a gestionar su tiempo libre y a luchar contra las pantallas y dispositivos tecnológicos…

Ya en las magníficas instalaciones de la MEDT, a mediodía se sirvió un almuerzo en cuya elaboración también colaboraron los chavales que siguen tratamiento. La sesión de tarde de RENCONTRES tuvo un carácter más práctico con la celebración de talleres sobre carrera de orientación adaptada y Educación Terapéutica del Paciente, dirigidos por Patrick Castéran y Paloma Bacarizo, que contaron con la participación de los jóvenes pacientes de la casa. Para terminar esta gran jornada compartiendo ideas y experiencias, los asistentes se despidieron con un imaginativo intercambio y exposición de conclusiones que cada uno escribía en una tarjeta que dejaba suspendida en docenas de globos de colores.